Encabezado

Capacitación en formulación de proyectos de desarrollo local para la generación de empleo

 

diplo

Por Esther Levy

Esta experiencia que recién comienza forma parte de un proyecto de trabajo sostenido que desde el año 2011 articula acciones entre el CIDAC, las organizaciones sociales y políticas de la CABA y de la Provincia de Buenos Aires y el Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social. Es de esos proyectos que cobran sentido porque interpelan el sentido político del trabajo en la Universidad pública en vinculación con los actores que implementan proyectos en el territorio y con las políticas del Estado. La perspectiva que subyace a la propuesta de este tramo formativo es la del trabajo no sólo como generador de ingresos sino como constructor de la identidad individual y colectiva.

 

El eje de la capacitación se apoya en la construcción de conocimientos que fortalezcan los proyectos que están en marcha y los que se van formulando en el transcurso de estos dos meses. Partimos de la elaboración de un diagnóstico territorial de modo de objetivar el territorio concreto, verlo desde la experiencia cotidiana identificando a los actores y sujetos, saber leerlo y utilizar los datos de los relevamientos oficiales (trabajo, salud, educación, vivienda, etc.). La formulación de proyectos es otro eje central de la propuesta que se cristaliza en el hecho de que las organizaciones al finalizar el trayecto puedan presentar proyectos al MTEySS en el marco de diferentes líneas de las Políticas Activas de Empleo. De esta manera, el trabajo sobre un conjunto de herramientas teórico-metodológicas, además de los lineamientos específicos del Ministerio para cada línea, permiten a las organizaciones generar ejes de trabajo para dar respuestas a problemáticas específicas de su territorio. Los aspectos sobre la factibilidad y sustentabilidad económica también son parte de la propuesta formativa.

La característica de este proyecto es que el diseño intenta acompañar las dinámicas mismas de las organizaciones territoriales. Esto nos obligó a reformular contenidos, modificar las propuestas de trabajo y rearmar el equipo. Empezamos en 2011 con un equipo de cinco docentes y varios tutores que se encargaron de acompañar a las organizaciones en la formulación de los proyectos. La jornada era de 8 horas en el CIDAC una vez por semana. Hoy, a partir de la experiencia de estos años, la propuesta se territorializó mucho más aun dictándose los encuentros presenciales en tres sedes (CIDAC-Barracas, Hurlingham y Olivos) para que todos puedan llegar mejor y para estar cerca de los lugares donde las organizaciones implementan los proyectos. También aumentó la cantidad de participantes y organizaciones (46 organizaciones y 150 participantes aproximadamente). La estructura del proyecto fue modificándose y, de esta manera, adaptándose a las necesidades de los territorios. Estos cambios generaron, a su vez, nuevos desafíos como la rotación de los profesores por sedes, el aumento del número de tutores que implicó un proceso de cinco semanas de capacitación de un equipo de veinticuatro estudiantes avanzados y graduados de diferentes carreras.

Pero el desafío central, el que nos interpela como espacio de extensión y formación, es cómo lograr la democratización del conocimiento a partir de la construcción intersectorial de saberes donde las organizaciones sociales y políticas se sientan convocadas a debatir en el espacio de la Universidad pública sobre el diseño y la implementación de políticas públicas con anclaje territorial. Hablamos de darle un sentido contextuado al conocimiento que sirva como herramienta para la discusión y el debate, pero fundamentalmente para el fortalecimiento de los procesos organizacionales que se plasman en proyectos colectivos.

 

Hay mucho por hacer, pero el camino recorrido nos hace pensar en seguir avanzando, profundizando los logros y reinventando desafíos en esta relación Universidad-Estado-Organizaciones.